6 de abril de 2013

Una valiosa ofrenda... La vocación

sencillo y ordinario.
La vida sacramental es un pilar fundamental en la vida interior; sobre todo el sacramento de la reconciliación que ha logrado en mi, trabajar aspectos de tolerancia y reconocimiento de un Dios de Amor por encima de todas los conflictos y errores que solemos juzgar con ligereza, demostrándome que la grandeza de las personas a veces esta en aquello que llamamos defectos.

Mi vida espiritual se ha visto muy fortalecida cada vez que asumo no una mal llamada dificultad sino un reto extraordinario, aunque por supuesto …… he tenido momentos de oscuridad que no negare, muy por el contrario aceptare con total humildad, momentos que han podido hacerme retroceder en mi vida espiritual manteniéndome por tiempos sin saber hacia dónde ir y que hacer, pero busque refugio en la Santísima Virgen María que como hija, madre y mujer podría comprenderme……no me equivoque de elegir como padres y modelos a María y José, ambos han sido a través de su imagen familiar mi consuelo y fortaleza en mi vocación secular.

Mi vocación sigue firme y es una respuesta del hoy, mi deseo es que pueda seguir respondiendo SI hasta el final; pero prefiero gozar de cada SI en una fiesta personal diariamente; que cada vez que llega el amanecer pueda decir al Creador: Hoy nuevamente ESTOY AQUÍ PARA CUMPLIR TU VOLUNTAD. No quiero dejar pasar esta oportunidad para expresar mi profundo agradecimiento a todas aquellas personas que con sus oraciones me fortalecen y animan, a aquellos jóvenes que con su optimismo y experiencias de vida me van indicando que Dios me quiere en medio del mundo, siendo señal de que existe el amor verdadero y fraterno, que nada puede detener la carrera emprendida; que el trabajo callado y sencillo vence los engaños de este mundo, que hace sentir a muchos que no se puede dar nada a cambio de nada, que como algunos me dicen : eres una persona muy especial… yo respondo : yo no soy especial ….. lo especial es poder darse día a día en medio de ustedes… Uds. son los especiales.

Nada me hace más feliz que servir a Dios con mis virtudes y debilidades, seguir siendo luz y sal de la tierra en el HOY pero que trascienda hacia el MAÑANA….no importa todo lo que hay que luchar, no importa si hay que vencerse a sí misma….lo único importante es SOLO DIOS en mi vida y en la tuya…más allá de todo; porque todo lo demás se nos dará por añadidura.

Que este tiempo que se acerca nos llene de fortaleza para saber afrontar el sufrimiento cada vez que venga a nuestras vidas, para que valoremos con convicción la luz de la resurrección; que Jesús, José y María nos bendiga y acompañe en cada una de nuestras acciones.


Atentamente




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