RETIRO ANUAL 2010
Que maravilloso es el reconocer la misericordia de Dios por medio de Jesucristo ya que en su Encarnación acepta ser verdaderamente hombre y se convierte en el Señor de la historia, estas son las primeras palabras que nos vienen en mente después de finalizado el retiro de tres días en Santos Mártires de la ciudad de Limpio, pues no solo podemos conocer al Señor Jesús por medio de las oraciones sino también descubriendo las verdades de nuestra fe por medio del intelecto, y además quien la estaba dirigiendo (el Padre Caravias, SCJ) es uno de los mas reconocidos intelectuales de nuestro país.
El redescubrir a Jesús desde su Encarnación y entendiendo que se hizo “nada”, se hizo igual a nosotros, menos en el pecado, para comprender todo lo que el Hombre pasa, se hace nuestro hermano para acompañarnos en todo especialmente en nuestras miserias y fragilidades.
Nos ayudó también a aclarar las dudas que siempre están latentes en nuestro cotidiano andar (sobre el matrimonio, familia, la muerte de un familiar, amigo, de un joven o de un niño, el porque de las cosas que ocurren y de cómo aceptarlas…).
Con el correr de los días, el Padre Caravias, nos introdujo en las Cartas de Pablo, que fueron de gran valor pues de ellas empezamos a sacar versículos que aplicábamos en lo que el llama la “Oración de los Pobres” (Perdón, suplicas, credo, alabanzas, acción de gracias. Todas estas oraciones hacerlas a partir de un solo texto bíblico) además de la película que habíamos disfrutado en donde conocimos a un Saulo portentoso, hábil en los negocios , defensor de sus creencia, y como, el mismo encuentro con Jesús en el camino a Damasco, lo convierte a Pablo en defensor de la fe.
El sacerdote expositor, nos presentó un nuevo rostro de Dios, que lo sabíamos Todopoderoso, pero nuestro maestro del retiro nos presentó a un Dios para nosotros hasta ese entonces desconocido “todopoderoso en el amor”.
Damos gracias al Señor por esta nueva oportunidad de conocerlo más para amarlo más e intentar seguirlo mejor.
El redescubrir a Jesús desde su Encarnación y entendiendo que se hizo “nada”, se hizo igual a nosotros, menos en el pecado, para comprender todo lo que el Hombre pasa, se hace nuestro hermano para acompañarnos en todo especialmente en nuestras miserias y fragilidades.
Nos ayudó también a aclarar las dudas que siempre están latentes en nuestro cotidiano andar (sobre el matrimonio, familia, la muerte de un familiar, amigo, de un joven o de un niño, el porque de las cosas que ocurren y de cómo aceptarlas…).
Con el correr de los días, el Padre Caravias, nos introdujo en las Cartas de Pablo, que fueron de gran valor pues de ellas empezamos a sacar versículos que aplicábamos en lo que el llama la “Oración de los Pobres” (Perdón, suplicas, credo, alabanzas, acción de gracias. Todas estas oraciones hacerlas a partir de un solo texto bíblico) además de la película que habíamos disfrutado en donde conocimos a un Saulo portentoso, hábil en los negocios , defensor de sus creencia, y como, el mismo encuentro con Jesús en el camino a Damasco, lo convierte a Pablo en defensor de la fe.
El sacerdote expositor, nos presentó un nuevo rostro de Dios, que lo sabíamos Todopoderoso, pero nuestro maestro del retiro nos presentó a un Dios para nosotros hasta ese entonces desconocido “todopoderoso en el amor”.
Damos gracias al Señor por esta nueva oportunidad de conocerlo más para amarlo más e intentar seguirlo mejor.
Julia y Manuel
Asociados Laicos “Sagrada Familia” - Paraguay
Fernando de la Mora (Grupo Divino Niño Jesús)
Asociados Laicos “Sagrada Familia” - Paraguay
Fernando de la Mora (Grupo Divino Niño Jesús)
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