SINTIENDO A MI DIOS

SINTIENDO A MI DIOS

 Viky, Associada da S.F., de Condevilla-Peru,  partilha, muito agradecida a Deus-Família, sua experiência dos últimos tempos: o falecimento de seu querida pai, e a celebração de suas Bodas de Prata, em tudo sentiu nossa comapanhia.

  

En estos últimos meses me tocó vivir y experimentar dos momentos naturales de la vida  ¿contradictorios?  Muchas veces pensamos que no se pueden vivir tan cerca, el dolor y la felicidad, la perdida de mi padre sin duda un vacío profundo y doloroso, los 25 años de matrimonio una realización y felicidad. En estos  dos momentos me sentí BENDECIDA

Agradecida con la familia de PEDRO BIENVENIDO NOAILLES porque nunca me sentí sola,  nos acompañaron en todo el proceso de la enfermedad, la realización de la novena a nuestro Buen Padre  ayudo aceptar el desenlace y a pesar del dolor de su partida agradecida con nuestro Dios ya que le concedió lo mejor para él.

Por otra parte con pocas ganas y menos animo de celebrar nada, llegaría la fecha de mis 25 años de matrimonio, un caminar nada fácil porque el amoldarse el uno al otro con nuestros defectos y virtudes ha sido un proceso de aprendizaje de tolerancia y aceptación, ambos hemos crecido en el amor y experiencia para reflejarlo a nuestros hijos una tarea que se me ha hecho fácil (siempre lo digo)con la ayuda y la formación que recibo de ser asociada de nuestra gran familia , que mayor ejemplo de familia hemos podido heredar que el de JESÚS MARÍA Y JOSÉ. Saber que en todo momento estamos acompañadas acompañados pero más en las dificultades que se pude superar teniendo plena confianza en la misericordia de Dios.

Fue así que días previos al 4 de agosto (fecha de aniversario de matrimonio) fui llamada a casa de las hermanas en Condevilla me invitaron a una misa, sin muchas ganas acepte ahora puedo decir que hubiera sido una pena no aceptar fue una noche de muchos detalles, símbolos, dedicación, cuidaron cada momento cada minuto pensaron solo en mi felicidad y luego en casa, mi familia preparo un compartir. ¡Cómo no sentirme BENDECIDA si el  cariño de las personas que Dios me pone en mi camino me llena día a día!

Aprendí que se puede vivir y aceptar todos los momentos de la vida sean estos lo más tristes o lo más alegres, en esos pequeños o grandes acontecimientos está también la PRESENCIA de ese SOLO DIOS por el cual vivimos.

Victoria Ruiz Santana

Asociada - Perú